Ibéricos Benito & La Cueva del Ibérico

Corría el mes de febrero de 2010 cuando Arsenio Benítez entró en nuestra tienda.

Él venía de una empresa llamada Jamones Benito, que comenzó su andadura en 1956. Se vendió como una empresa familiar, dedicada al ibérico y con una línea de calidad y seriedad que enseguida me convenció.

Llevábamos 2 meses con el negocio y teníamos unos principios muy sólidos, pero un millón de dudas.

Después de hablar del mercado, de productos y mil cosas más, le hicimos un primer y tímido pedido.

5 paletas ibéricas de cebo y algunos jamones gran reserva, nada más.

Cuando empezamos a venderlas y a recibir buenas opiniones de nuestra clientela, nos dimos cuenta que habíamos acertado.

Comenzamos a aumentar los pedidos; a llenar la tienda de jamones, paletas y embutidos, como nos pedía Arsenio, y la respuesta fue la esperada: comenzamos a vender más, a ser reconocidos por una línea de calidad.

Pasa el tiempo y la relación se afianza: somos punto de venta exclusivo en Setenil y por supuesto, bares y restaurantes confían en la línea de calidad y precios que ofrecemos.

Recientemente la empresa original se divide. La nueva empresa se llama Ibéricos Benito, pero pasados unos meses nada ha cambiado para nosotros: calidad, variedad, servicio y seriedad al igual que siempre, si no más.

Después de 11 años, podemos afirmar que Ibéricos Benito - La Cueva del Ibérico es una relación sólida, seria y duradera.